La felicidad es una actitud que
debemos elegir siempre.
Vayamos, pues, en pos de
atraparla, ahora, en este presente, ‘Hoy’
La felicidad consiste en poner
nuestra entera confianza en dios,
entregarle a diario nuestra vida, para que disponga de ella, la guíe e ilumine.
La felicidad consiste en amar a
dios, a la vida y a todo lo que en ella existe.
La felicidad se encuentra en las
pequeñas cosas: contemplar un amanecer o un atardecer, oír el canto de los
pájaros, ver los rayos del sol filtrándose a través de las hojas de los
árboles, el bullicio y risas de los niños, en saber perdonar y olvidar las
ofensas, romper las cadenas del egoísmo, en saber dar y darnos a nuestros
semejantes y en el desapego de las cosas materiales. Si supiéramos valorar todos
estos pequeños detalles y grandes acciones y felices.
El último fin del hombre debe ser
su verdadera felicidad, y está felicidad
no consiste en los placeres de los sentidos ni en las riqueza y otros bienes
materiales, sino en la práctica de la virtud.
la felicidad consiste en hacer el
bien
“felicidad
es un verbo que en lo pasado se llama “recuerdo”, y en lo futuro,
“esperanza” y en lo presente consiste en
tener lo que se necesita, hacer lo que uno le gusta y gustarle hacer lo que
tiene que hacer”
emerson
“no
pretendas que las cosas ocurran como tú quieres. desea más bien, que se
produzcan tal como se producen y serás felíz”
‘la
alegría de tu corazón mantiene la luz del día en tu mente y la llena de una
srenidad estable y perpetua” Joseph adison
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