CONSEJOS PARA LOS HIJOS

v No tengas miedo de hablar. Tus padres están interesados sinceramente por saber lo que piensas. Trata de decírselo cuantas veces sea posible.

v Aprende a escuchar. No te dejes llevar por la rebeldía ciega. Es posible que tus padres estén equivocados en lo que creen; pero escúchales. también a ti debe interesarte lo que ellos piensan.

v Discute con tranquilidad. Puedes defender tus puntos de vista sin alterarte. La forma más fácil de hacer que tus padres aprendan a escuchar consiste en que tú mismo aprendas a exponer tus ideas con claridad  y tranquilidad.

v Admite que tus padres pueden tener razón en algunas cosas. No te aferres a la tonta idea de que todo lo que dicen tus mayores está equivocado sólo porque procede de ellos . Sé lo bastante inteligente como para saber distinguir entre lo acertado y lo erróneo de lo que te diga.

v No asumas aire de grandeza. Pocas cosas sacan de quicio con mayor frecuencia a los padres actuales como el aire de suficiencia, de suprema sabiduría, de indiscutible superioridad que asumen muchos jóvenes de hoy. Sé humilde. Recuerda que en la humildad reside la verdadera grandeza.

v Respeta a tus padres si quieres conquistar y merecer su respeto.  Aunque los consideres –anticuados- y no estés de acuerdo con muchas ideas, tus padres merecen tu respeto como seres humanos. Sólo respetando a tus mayores te harás merecedor de su respeto.

v Sé constructivo.  No te concretes a señalar a tus padres las muchas cosas malas que hay en el mundo que te heredaron. Concéntrate mejor en hacer lo posible por corregir todo lo malo que te sea factible cambiar.

v Acepta la ayuda que tus padres te ofrezcan.  No te dejes dominar nunca por el orgullo. Estás aprendiendo a vivir y a aceptar la ayudan que te ofrecen y dar ayuda que te piden. Esa es una de las grandes lecciones de la vida. Sé lo bastante sabio para reconocer que no tienes todas las soluciones y que un poco de ayuda de quienes tienen más experiencia que tu, no te va hacer daño.

v Ama  a tus padres tal y como son.  Acaso quisieras que tus padres fueran más  modernos, más comprensivos y menos conservadores. Pero son como son. Debes aceptarlos así y tratar de comprender sus actitudes como una aplicación práctica de tu amor hacia ellos.

v Interésate por el mundo de los mayores.  No concretes tus esfuerzos de información a tu propio mundo. Trata de saber todo lo posible del mundo de tus padres, el cual antes de lo que te imaginas, será tu propio mundo.